En mayo de 1994, fue inaugurada en Constantí (Tarragona), la primera Planta de Tratamiento de Residuos Sanitarios del Estado.
La Planta de Tratamiento, trata de dar solución a la gestión de este tipo de residuos, bajo criterios de una gestión totalmente idónea, aplicando un modelo de gestión basado en la prevención y minimización de los riesgos asociados a la manipulación de estos residuos, según argumentó Vilalta.